Anoche fue una velada de emociones. Tuvimos en Nordre Skole una fiesta de despedida. Primero tuvimos un visionado de películas realizadas por alumnas danesas, sobre las actividades colaborativas y del día en la escuela de la naturaleza. Después se dio paso a la entrega de diplomas, y el certificado de asistencia a los profesores. Delicias preparadas por las familias para cenar, y bebida de fresa. Algunos comen muy rapidito para irse corriendo a jugar al fútbol, da igual que chispee y haga frío. Abrazos, risas, más risas y a dormir, que hay que levantarse muy temprano.
A la mañana siguiente nos despedimos de las familias en el aeropuerto de Karup. Abrazos y besos, y promesas de visitas futuras. Las familias que han acogido a nuestro alumnado han sido un ejemplo de hospitalidad, generosidad y cariño.
Viajamos de nuevo con los galeses en el avión bimotor de aspas hasta Copenhagen, donde gastamos todas las monedas danesas posibles, las kronas, en los últimos souvenirs.
En Barcelona tenemos tiempo de sentarnos y reflexionar sobre algunos aspectos de esta vivencia.
Farvel amigos! (hasta pronto) Tak! (gracias)
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